Publicación de RTVE

La danza de la muerte mantiene viva la Semana Santa en Verges

PorYusra Alami Marrad
La danza de la muerte mantiene viva la Semana Santa en Verges
Unos bailarines vestidos de esqueletos en la danza de la muerte
Cada Jueves Santo, en Verges (Girona), se celebra la danza de la muerte, una tradición que se mantiene viva desde la Edad Media y que tiene sus raíces en las epidemias de peste negra que recorrieron Europa. Con el tiempo, la Iglesia adoptó esta representación como herramienta para recordar a los fieles la inevitabilidad de la muerte. El programa ‘Pasión y gloria’ muestra cómo se vive esta celebración durante la Semana Santa y conversa con dos vecinos del pueblo que participan en ella.
La danza de la muerte
La preparación para una representación de la danza de la muerte.Los bailarines llevan el traje con calaveras y esqueletos en un ambiente misterioso y con iluminación azulada.

¿En qué consiste la danza de la muerte?

Diez figuras esqueléticas recorren las calles al ritmo grave de un tambor que simboliza la llamada de la muerte. Cinco de ellas interpretan la coreografía central, mientras que las otras cinco sostienen antorchas que iluminan el camino. La luz proyectada sobre las fachadas crea sombras inquietantes, que intensifican el simbolismo de esta noche.

El eje de la representación son los cinco danzantes principales, que saltan y se mueven con agilidad mientras exhiben mensajes sobre el fin de la vida. Uno de los adultos lleva una guadaña con la inscripción en latín Nemini Parco, «No perdono a nadie». El esqueleto central ondea una bandera con la frase en catalán Lo temps és breu, «El tiempo es breve».

A ambos lados, dos niños bailan con pequeños platillos que contienen ceniza, recordando que todas las personas acabarán convertidas en polvo. Detrás de ellos, otro esqueleto infantil lleva un reloj sin agujas. Cada salto suyo simboliza una hora distinta, reforzando la idea de que la muerte puede llegar en cualquier momento.