Cdor.Enrique Iglesias entrevistado por Zelmar Lissardy y flagelo de la PASTA BASE

El siguiente es un testimonio desgarrante. Le está pasando a un lector habitual de este blog, pero, también, a toda la población de Uruguay. Es otra vez el tema de la droga, sus implicancias en las relaciones personales, en lo económico, y en la vida de quienes rodean al drogadicto. Nada de ello está dramatizado. Es la descripción despojada de alguien que todavía sigue sufriendo el problema. Ofrece el punto de vista de las víctimas de este flagelo. También algunas cifras que muchos conocen, pero no provocan una reacción para revertirlas. El autor es un colega. Pidió que se publicara su testimonio dejando constancia solo de sus iniciales: M.C. Es un texto 10 veces más largo que los artículos habituales en este blog, pero vale la pena leerlo, reflexionar, hablar sobre él con otras personas, y, quienes tengan alguna porción de poder que les permita hacer algo, que lo haga. El título es el que le puso el autor.

El flagelo más importante que ha tenido nuestro país en toda su historia podríamos llamarlo, sin temor a equivocarnos, «Pasta Base»- Más que la crisis económica del 2002, más que la aftosa, y más que cualquier catástrofe natural que haya azotado a nuestro país, sin duda es la «PASTA BASE» lo que más daño a causado a nuestra sociedad. Las pérdidas por culpa de la «maldita» se miden en vidas, dinero, seguridad, salud, familias, cultura y muchas otras cosas que hemos perdido los uruguayos en poco tiempo y casi sin darnos cuenta. El 1,4% de la población de Uruguay entre 15 y 64 años, unas 49.000 personas, son consumidores de cocaína. Es la cifra relativa más elevada de la región. No hay otro país que tenga una porción tan alta de su población afectada por este consumo, aunque las autoridades dicen que es un país de paso de la droga hacia otros destinos. En los últimos 10 años hemos visto en TV más horas de información policial que de futbol, y eso se debe al gran aumento de la delincuencia por influencia de las drogas. Los más pequeños han sido los más afectados y en ellos la sociedad toda descarga su ira y los mira con desconfianza. A los medios de comunicación, hasta se le ha «llamado la atención» por parte del gobierno por dar tanta información sobre inseguridad.

MENDICIDAD OCULTA – En todas las esquinas están los adictos, haciendo malabares y limpiando parabrisas para lograr conseguir la dosis que le dará unos pocos minutos de euforia y felicidad a cambio de muchas horas de angustia y desesperación de sus familias. Los «cuida coches» han proliferado de una manera alarmante, es una forma oculta de mendicidad que hasta parece ser un trabajo digno. El que lidera la cuadra se hace propietario de ella y eso genera una violencia diaria que deben dirimir llegando a pelearse entre ellos por una cuadra de «mangueo». También otros exigen la tarifa al estacionar el coche (por adelantado), mucha gente prefiere darles unas monedas antes que tener que pagar el pintor, sin saber que están financiando la droga indirectamente. Es bueno saber que la mayoría de los «cuida coches» (los que tienen autorización municipal), generalmente no son adictos a las drogas y es esa su forma de vida y sustento de sus familias.

LOS NI-NI – En los parques y ramblas es muy común verlos reunidos fumando el clásico «porrito» o bebiendo la «checha». Se les ha denominado los NI-NI porque NI estudian NI trabajan, pero sin embargo se las ingenian para conseguir la droga o el alcohol. Es alarmante la deserción a los estudios secundarios, un informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) muestra que la proporción de jóvenes de entre 15 y 17 años que asisten a un centro educativo pasó de 77,7% en 2009 a 75,5% en 2010. Es decir que el 24,5% de los adolescentes de entre 15 y 17 años no asisten a un centro educativo, lo que suma unos 39.800 jóvenes, según las proyecciones de población por edades del INE. Con respecto a 2009, en 2010 creció en casi 4.000 la cantidad de jóvenes fuera de los establecimientos de educación. Como consiguen la droga-Para algunos la necesidad de consumir les lleva caminar todo el día en busca de esas monedas para ir a comprar en «la boca» y a otros más audaces empuñar un arma para conseguir el dinero fácil. Estos últimos son atrapados como moscas por la policía que con solo rastrear la zona de donde fue la rapiña, les encuentra fumando su botín y con lo robado dentro de sus bolsillos. Es que son inocentes víctimas de la droga más dañina que se conoce hasta ahora. Los chicos que compran en las bocas generalmente llevan cosas para vender y canjear, se dan casos increíbles de muchachos que dejan artículos de miles de dólares por unas pocas dosis de 10 dólares. La urgencia que tienen en ese momento no les permite negociar y siempre optan por dejar todo lo que llevan y volver otro día por si les dan algo más a cuenta. Son frecuentes las peleas en las que los dueños de las bocas los echan a la calle y los amenazan que si regresan les irá muy mal. Luego llegará el momento en que se sienten tan mal que a veces tratan de vengarse denunciando la boca y hasta cuelgan sus zapatos deportivos (que no fueron aceptados como pago), en los cables para mostrarles a la policía «aquí hay una boca».

La acción de arrojar un zapato y colgarlo en un cable o tirante telefónico en las alturas se conoce en inglés como Shoe tossing (o shoe flinging), y está extendida en en países como Estados Unidos, Canadá, Gran Bretaña, España, Australia, Nueva Zelanda, Argentina, Brasil, México, Ecuador e Irlanda. No es nada extraño encontrar colgadas decorando el paisaje «como si hubieran caído del cielo». Entre las explicaciones y leyendas, las más siniestras están emparentadas con códigos asociados al delito, la venta de drogas o pandillas urbanas. Según se cree, en zonas de Estados Unidos las zapatillas colgadas en cables, podrían utilizarse como un código o señal para anunciar la cercanía de una casa o un punto de venta de drogas como crack, o heroína. De hecho en ciudades como Los Ángeles, en California, son las propias autoridades las que se ocupan de quitar las zapatillas ante las sospechas de algunos vecinos. También existen otras leyendas urbanas, que explican que las zapatillas colgadas, se utilizan para marcar territorios dominados por pandillas que controlan el barrio.

¿Que hacen los gobiernos? Cuando asumió el ex presidente Tabaré Vázquez muchos padres sintieron hasta un alivio al pensar que un médico se preocuparía por el tema y lograría encontrar una solución para la internación de adictos. Pero poco duró la ilusión, Tabaré centró su lucha, y pasó su presidencia fustigando otro de los vicios arraigados, el cigarrillo, que si bien es cierto que gracias a esa lucha ha bajado el consumo y mucha salud se ha ganado combatiendo el cáncer de pulmón, no podemos dejar de ver que el otro consumo mucho más dañino e importante es el alcohol, seguido por las drogas y ahora la ludopatía pero poco o nada se ha hecho al respecto. No basta con combatir el narcotráfico, hay que encontrar soluciones para los afectados y procurar soluciones para sus familias. Si hablamos de cifras de consumo, son alarmantes y va en aumento . Siempre las soluciones van detrás de la realidad y la mayoría de las veces no llegan a tiempo para evitar la perdida de una vida. El actual presidente José Mujica, en su discurso pre electoral habló de centros de rehabilitación y de algunos lugares para adictos que nunca se han concretado. Habló de darles trabajo en la tierra en el campo y ponerles a ser útiles para la sociedad, pero hasta ahora no ha llegado esa solución tan esperada. ¿Y los padres de adictos qué? Este gobierno hasta les ha echado las culpas de que sus hijos cometan delitos, porque no han sabido poner límites y hasta se ha sugerido hacer responsables a los padres, de los ilícitos de sus hijos. Pero claro, que se refería a los padres que tienen con que responder, Porque, ¿qué pasaría con los padres de los marginados que viven del propio Estado y también pertenecen al grupo de los NI-NI? Muchas son las familias afectadas, y basta hablar del tema para enterarnos de que el vecino y el primo y la hermana de tal o cual se metió en eso de la pasta y le robaron, etc.

Mientras el gobierno intenta buscar soluciones, desfilan ministros de Interior, que cada uno con su librito, no logran combatir a los traficantes, no es suficiente la lucha contra el narcotráfico que lleva la delantera liderando el mercado de las drogas. Todos los días escuchamos que la policía incauta drogas, tantos quilos y tantas «tizas» pero eso tiene una lectura oculta, solo significa que justamente cada día hay más en las calles. Los operativos de saturación han sido bastante efectivos, pero, fuertes presiones hacen que poco a poco vayan mermando. Cuando vemos patrullajes de caballos sobre la avenida 18 de julio nos ponemos contentos porque parece que nos cuidan, pero eso también nos dice a las claras que el tema de la falta de seguridad está instalado y lo que está tratando de hacer el ministerio del interior es «disuadir» para evitar el tener que «actuar».

LA SOLUCION SOLO ESPERA POR VOLUNTAD POLÍTICA – En definitiva queremos ayudar a buscar soluciones y no buscar culpables de la situación que nos está destrozando nuestro país. Es por eso que nos permitimos dar algunas pautas de lo que a nuestro modesto entender de padres de adictos, podría servir.

PRIMERO QUE NADA: ES URGENTE CREAR UN CENTRO DE REHABILITACION DE VERDAD – Esto permitiría internar allí a los que realmente quieren salir de la droga y/o aquellos que sus padres consigan mediante la firma del psiquiatra, comprueben es necesaria la internación compulsiva.

SEGUNDO – Usar los cuarteles y/o dependencias militares para trasladar a los que habitan hoy en las cárceles y están por consumo y rapíñas realizadas bajo la influencia de drogas. Esto permitiría descomprimir el colapsado sistema carcelario que solo sirve para crear más delincuentes y muy lejos esta de rehabilitar a nadie.

TERCERO – Crear un centro de ayuda a padres de adictos para fortalecimiento de su núcleo familiar de forma de abordar el problema con la ayuda de gente capacitada.

CUARTO: ¿DONDE COSEGUIR EL DINERO PARA LOS TRES PUNTOS ANTERIORES? Que todo el dinero incautado por concepto de tráfico de drogas y narco tráfico sea utilizado para lograr lo antes expuesto. La Junta Nacional de Drogas tendrá que dedicarse a transformar en dinero, mediante remates públicos, todos los bienes incautados por esos delitos. De esta manera esos lujosos autos, lanchas, aviones y hasta estancias de miles de hectáreas podrán ayudar a rehabilitar a quienes les hicieron tanto daño-

Las internaciones compulsivas – La droga que se ha pegado tanto a nuestros jóvenes los ha transformado en adictos a una sustancia altamente venenosa que es muy difícil de dejar. Por más internaciones en los escasos y caros centros de rehabilitación que existen en nuestro medio, reinciden y recaen en la maldita una y otra vez. Los padres de adictos ya no saben más que hacer y recurren a internaciones compulsivas fuera de fronteras con la esperanza de que si están 2 años en abstinencia (cosa muy difícil de lograr), podrán volver a ver a sus hijos normales. Estas largas y costosas internaciones en «fasendas» en Brasil O «comunidades terapéuticas» en Argentina y Chile oscilan entre los mil y dos mil dólares mensuales y no aseguran una rehabilitación segura. En realidad los padres pagan por la ilusión y compran tiempo y tranquilidad a muy alto precio. La cura 100% no existe y muy pocos son los que logran alejarse de las drogas por mucho tiempo, siempre recaen. La voluntad es lo primero que ataca la droga, y es lo último que recobra el adicto y hacen falta muchas recaídas y golpes para hacer conciencia de que está en el camino equivocado. Generalmente el adicto busca mil formas de seguir consumiendo sin que lo sepan sus familiares, manipulando, que es lo que saben hacer mejor, diciendo …»la droga ya fue» pero se la siguen dando.

SEGURIDAD – Hijos que matan a sus padres, padres que matan a sus hijos, tema que nunca se había instalado en nuestras páginas de la crónica roja, hoy ya hemos perdido la capacidad de asombro y son tema cotidiano. El último hecho accidental que un padre ha matado a su propia hija pensando que era un ladrón en su casa ha conmovido a la opinión pública a tal forma que se está debatiendo hoy si es bueno o no «armarse». La ira y la rabia no puede ser motivo para usar un arma contra nadie, pero, con los casos de copamientos que se están dando todos estamos muy tensos y desconfiados a tal extremo que se ha incrementado la venta de armas. El gobierno atribuye esto a un tema cultural y perdida de roles del padre, madre y maestro principalmente. Pero lo cierto es que nos han robado a todos, o a un familiar o amigo, hay más delincuentes y más delitos y las razones siempre apuntan a las drogas y su venta o consumo. La policía se quiere adaptar a la nueva delincuencia que se ha instalado pero como se siente perdiendo la batalla, pide colaboración a la población. Frecuentemente escuchamos comunicados en los informativos aconsejando a la gente a no poner carteras en el asiento del acompañante en el coche, para evitar le rompan el cristal y se lo roben en una esquina. Esto también tiene una doble lectura, porque en vez de aconsejar eso, la policía debería evitar que esas bandas de adictos y maleantes acosen a los conductores que son los que sufren constantemente en cada esquina ese stress.

Esta claro que nosotros pagamos los impuestos para recibir esa protección que cada vez es menos de los organismos y pasa más a manos privadas. Los instaladores de alarmas y rejas han sido los más beneficiados de la falta de seguridad que sufrimos los uruguayos. Cada día vemos que nacen nuevas empresas de seguridad y está siendo muy normal poner una cerca electrificada. Cualquiera puede ver y contar la cantidad de rejas que hay en una sola cuadra, seguramente le sorprenderá ver que hasta los apartamentos de altos las tienen en sus ventanales hasta el piso décimo algunos. Alambres de púas y vidrio molido en los pretiles, perros adiestrados para matar, etc, todo sirve para protegernos de los delincuentes que cada día son más y buscan siempre la manera de burlar esas medidas de seguridad. Escuelas de seguridad ciudadana, esto ha sido fomentado por el propio ministerio del interior entregando diplomas a quienes hacen ese curso para protegerse de los delincuentes. Los vecinos de los barrios de carrasco se han organizado mediante «silbatos» llamando la atención de esa forma cuando hay peligro en la zona.

El gobierno dice que han bajado los índices de pobreza y que son solo 30.000 personas las que están censados como indigentes. Evidentemente no todos los pobres son adictos ni delincuentes, esta claro que hay más gente honesta, pero hay que saber que la pobreza está íntimamente ligada al consumo porque es allí donde los narco prefieren hincar su diente consiguiendo gente necesitada para abrir bocas de venta.

DATOS ESCALOFRIANTES – El consumo de cocaína entre liceales de 13 a 17 años es mayor en Uruguay que en otros cinco países de la región. Comisión de la OEA fomenta medidas alternativas a la prisión para quienes delinquen por drogas. Un informe subregional sobre uso de drogas en la población escolarizada, realizado en el período 2009-2010 por la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas de la OEA (Cicad) da cuenta del consumo de alcohol, tabaco, marihuana, cocaína, pasta base e inhalantes en países sudamericanos. El informe abarca Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador, Perú y Uruguay, y marca la prevalencia en el consumo de drogas en estudiantes secundarios, por país, en el período mencionado. El 3,5% de los adolescentes entre 13 y 17 años que concurren al liceo en Uruguay declara haber consumido cocaína al menos una vez en los últimos 12 meses. Le sigue Chile con 3,2% y Argentina con 2,7% En referencia a la marihuana, el 13,9% de los encuestados uruguayos admite haberla consumido en el último año. El porcentaje sólo es superado por Chile (14,3%) y está muy por encima de Argentina (8,2%), que es el tercer país en esta lista de seis. El 1,1 % de los liceales dijo haber consumido pasta base y el 2.2% inhalantes. En las dos sustancias Chile tiene el mayor porcentaje (2,8 y 3,4). En estas cuatro drogas, el consumo de los hombres es notoriamente mayor al de las mujeres (marihuana: 17,3 a 10,9; cocaína: 5,1 a 2,1; pasta base: 1,4 a 0,8; inhalantes: 3,2 a 1,4). En lo que refiere al alcohol, los liceales uruguayos están entre los tres países que más lo consumen. El 53% reconoce haber tomado alcohol en los últimos 12 meses (el mismo guarismo que registra Chile), siendo Argentina es el que presenta el mayor porcentaje (60%). En cuanto al tabaco, el 21% dice haberlo consumido en el último año. En Chile, es el 33% y en Argentina el 22%.

BREVE CONCLUSIÓN: ES URGENTE – Hay que legislar al respecto, no podemos dejar que toda una generación de jóvenes termine destruyendo su futuro. Atención gobernantes hagan algo, pero algo coherente, cuando se habla de legalizar la marihuana, los padres de adictos sentimos un cachetazo y los narcos piensan que una nueva forma de negociar se les abrirá. Es tiempo de legislar sin mirar banderas partidarias. Cortar con la publicidad de bebidas alcohólicas seguramente será una medida fuerte pero efectiva, basta de publicidad que promueve ir a la «timba», basta de máquinas tragamonedas en cualquier lugar, basta de cajeros automáticos dentro de los casinos. (Esto último es vergonzoso), el BROU “nuestro banco país” principalmente ha instalado esas posibilidades para que los ludópatas dejen todos sus ahorros en esas rutilantes casas de empeño.

BASTA DE PERMITIR LA MENDICIDAD EN TODAS LAS ESQUINAS.

GUERRA FRONTAL A LA PASTA BASE, AUMENTANDO LAS PENAS A LOS QUE LA VENDEN (considerarlo intento de envenenamiento, porque lo es)

POR FAVOR QUE ALGUIEN HAGA ALGO, YO YA EMPECÉ ESCRIBIENDO ESTO

ES RESPONSABILIDAD DE QUIEN LO RECIBA LO HAGA CIRCULAR POR EL BIEN DE NUESTROS HIJOS Y EL PAIS TODO.

MUCHAS GRACIAS POR SU TIEMPO, QUE ES LO MÁS VALIOSO QUE TENEMOS, POR ESO MISMO NO PERDAMOS MAS TIEMPO .

M.C.