El PSOE gana, Vox se dispara y Cs se hunde en unas elecciones que complican la gobernabilidad de Sánchez
El PP se mantiene como segunda fuerza, Vox pasa a tercera, Podemos se queda cuarta y ERC supera a Cs como quinto partido
El PSOE ha ganado las elecciones generales con el 28,01% de los votos y 120 escaños, pero pierde tres con respecto al 28A y se abre para Pedro Sánchez un escenario más complicado aún que en los pasados comicios para formar un Gobierno estable. El PP, por su parte, se consolida como líder de la oposición y se mantiene como la segunda fuerza más votada con el 20,81% y 88 escaños, 22 más que hace tan solo siete meses, con el 99,3% escrutado.
Vox se convierte en el ganador de la noche con un espectacular incremento de votos que convierte a la de Santiago Abascal en la tercera fuerza de España. En la subida más alta de este 10N, Vox pasa de 24 a 52 escaños en el Congreso y es la fuerza elegida por el 15,1% de los votantes.
Unidas Podemos y sus confluencias se mantienen como cuarta fuerza con el 12,84% votos y 35 escaños, bajando en siete con respecto al 28A; mientras que Ciudadanos es el partido más castigado en esta repetición electoral, con un descalabro que le hace caer hasta la sexta posición. La formación de Albert Rivera se deja por el camino desde abril un total de 47 diputados y es adelantada incluso por ERC, que se coloca como quinta fuerza en un Congreso con la mayor fragmentación de la historia donde tendrán representación 17 partidos, muchos de ellos de corte regionalista. Son cinco las nuevas formaciones con representación: Más País, la CUP, el BNG, Teruel Existe y Coalición por Melilla.
El bloque de izquierdas supera al de derechas pero no se acerca a la mayoría
Esta repetición electoral abre un nuevo escenario de incertidumbre en España porque ningún bloque, ni el progresista ni el conservador, suma la mayoría absoluta de 176 diputados. El de izquierdas- formado por PSOE, Unidas Podemos y Más País (el partido de Íñigo Errejón que entra con tres diputados) suma 158, frente al bloque de derechas- PP, Vox y Ciudadanos- que obtiene 150. De esta forma a Sánchez solo le queda tratar de cerrar un acuerdo o con Unidas Podemos y los independentistas, o con el PP. Dos escenarios que él no quería afrontar.
Las fuerzas nacionalistas e independentistas mantienen más o menos los mismos escaños que el 28A- ERC, con 13 (pierde dos); Junts per Catalunya, con ocho (gana uno); y el PNV, 7 (suma uno). El resto del Parlamento queda así: EH Bildu (cinco), la CUP (dos) Coalición Canaria (dos), Navarra Suma (dos) y con un representante el BNG, el PRC, Teruel Existe y Coalición por Melilla.
La repetición electoral complica la gobernabilidad de Sánchez
Sin llegar a ser una victoria amarga porque tiene posibilidad de gobernar, Sánchez tiene que mirar a dos opciones que no le convencen. Puede tratar de pactar con Unidas Podemos, que no renuncia al Gobierno de coalición, pero aunque ambos ahora se entendieran no suman, así que el PSOE tendría que conseguir el apoyo de los nacionalistas e independentistas.
Otra vía en una situación endiablada para el socialista es buscar el acuerdo con el PP, pero los ‘populares’ ya dijeron que no iban a facilitar su investidura». En los pasados comicios de abril PSOE y Cs, otra opción entonces de gobernabilidad, sumaban una cómoda mayoría absoluta, pero el derrumbe de los naranjas hace inviable esa opción.
Abascal, uno de los triunfadores, celebra la «gesta» de Vox
Vox ha conseguido llevar su mensaje de «reconquista» y dobla su representación parlamentaria con Abascal, convertido ya en el tercer líder del país, solo por detrás de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Recibido al grito de «presidente, presidente», el líder de extrema derecha ha reivindicado la «gesta política más fulgurante y más rápida de la democracia española». Su partido, ha dicho, hace once meses «no tenía representación en la patria» y ahora es la tercera fuerza. Vox ha logrado situarse como primera fuerza política en la Región de Murcia y como segunda en Andalucía.
«No vamos a dar ni un paso atrás y defenderemos en las Cortes lo mismo que hemos defendido todo este año de campañas electorales», ha asegurado, para avanzar que con sus escaños ahora podrán recurrir las «leyes liberticidas que los otros partidos han dejado pasar».
Rivera asume la debacle de su partido y propone un Congreso
Había llamado a la remontada durante la campaña pero los peores augurios se han hecho realidad para la formación naranja, que se coloca en su situación más compleja desde su entrada al Congreso en 2015, con 40 escaños de golpe. Su votante no ha entendido los giros- del 28A al 10N ha pasado del cordón sanitario a Sánchez a querer ser bisagra para un gobierno socialista- y ha sufrido un castigo que el propio Rivera ha calificado como «mal resultado».
Ha propuesto la convocatoria de un congreso extraordinario y ha dicho que se tomarán «todas las decisiones que se tengan que tomar». Se podría abrir ahora el debate de la continuidad del líder de un partido que perdió a dirigentes importantes que no estaban de acuerdo con el bloqueo a Sánchez y el acercamiento a Vox, y que se ha queda ahora con representación en tan solo cuatro comunidades autónomas: Andalucía, Cataluña, Madrid y Valencia.