En un lugar de La Mancha de cuyo nombre no quiso recordar…
El castillo de Peñaroya
Hemos comenzado a transitar por «la ruta del Quijote» en Ciudad Real, Castilla La Mancha, vivitamos un monumento histórico declarado «bien de interés cultural» localizado en el paraje llamado «Argamasilla de Alba».
Algunos historiadores dicen que esta fortaleza perteneció a los musulmanes y que luego de la reconquista ha sido reformada.
Como sabemos los musulmanes gustaban de lugares altos y bañados por aguas para vivir, aunque no faltan quienes señalan antecedentes romanos en el lugar.
El castillo de Peñaroya, esta enclavado en un sitio a orillas del alto Guadiana, éste río que recorre una distancia total de 818 km, de los cuales 578 km corresponden a territorio español, 140 km a portugués y 100 km a zona fronteriza.
Estamos entonces en un lugar donde el agua juega un papel preponderante y al haber sido nombrado «Parque nacional de las lagunas de Ruidera» hace que miles de turístas le visiten, y uds. con España vale también.
Ermita despeñadero.
En el mismo patio de armas del castillo se encuentra esta ermita que gurada en su altar una virgen, «Nuestra señora de la Encarnación de Peñaroya».
Cuenta la tradición oral que fue encontrada tras la conquista del castillo por un moro cautivo (para los de Argamasilla) y por un pastor para los de La Solana.La imágen de madera es bizantina y seguramente ha sido creada antes del siglo XII. La original se encuentra celosamente guardada en el museo, ésta es una réplica.
Argamasilla de Alba
«En un lugar de la mancha de cuyo nombre no quiso acordarse Cervantes, es que comienza , la ruta del Quijote».
Argamasilla de Alba esta situada a 12 kmts del embalse y Castillo de Peñaroya.
Recorrer sus limpias calles nos mete dentro de las letras de Cervantes a cada paso, poder entrar a «La casa de Medrano», lugar declarado monumento artístico nacional desde 1972, y en su interior una humilde y rústica cueva se identifica como la prisión en la que Miguel de Cervantes comenzó a escribir su inmortal obra.
Los viejos molinos manchegos conviven con los nuevos sin importarles cuanto viento ha pasado por ellos.
En la plaza del pueblo…«Esta que veis de rostro amondongado, alta de pechos y ademán brioso, es Dulcinea, reina del Toboso, de quien fue el Quijote aficionado».
CONTINUAREMOS POR LA RUTA DEL QUIJOTE
Agregamos este documento que nos hace conocer en un resumido audio a Miguel de Cervantes Saavedra
