- Vox se dispara hasta los 13 procuradores y Soria ¡YA! entra en las Cortes con tres escaños
- El PSOE queda segundo y no tiene alternativa a la derecha y Ciudadanos se hunde con solo un escaño.
Tras PP, PSOE y Vox, como cuarta fuerza en Castilla y León se coloca Unión del Pueblo Leonés (UPL), que aumenta su representación pasando de uno a tres procuradores, seguidos de Soria ¡YA! que entra por primera vez en el Parlamento en quinta posición con otros tres representantes y como primera fuerza en la provincia de Soria. Unidas Podemos cae hasta el sexto lugar y se deja un representante de los dos que tenía y Ciudadanos sufre otra durísima derrota y baja de doce escaños a uno en una caída libre que no tiene freno en los últimos procesos electorales. Por último, Por Ávila se queda igual, con un escaño, en un parlamento que contará con ocho partidos diferentes con representación.
Castilla y León votaba este 13F entre la continuidad, con un PP que lleva gobernando ininterrumpidamente 35 años, o un cambio histórico, liderado por el PSOE, que no ha podido superar a los ‘populares’. Ha ganado la continuidad, por tanto, pero el escenario tras estos comicios cambia porque ahora el PP se ve obligado a cambiar de pareja de baile y si antes necesitaba a Ciudadanos, ahora tiene que mirar a su derecha y hablar con Vox, que ya ha avisado cada día de la campaña de que su apoyo al PP no será «gratis».
En una noche electoral que no plantea más sumas posibles que la de PP y Vox, queda ahora por ver qué condiciones plantearán estos a los ‘populares’ para investir a Alfonso Fernández Mañueco. La única suma viable para acometer una investidura y la formación de un gobierno es la de estas dos firmaciones, ya que suman hasta 44 procuradores, tres por encima de la mayoría parlamentaria en las Cortes de Castilla y León.
Las lecturas nacionales de esta cita electoral que abre un largo período de urnas- con siguiente parada en Andalucía y que culminará con las elecciones generales a finales del año que viene- no se van a hacer esperar porque podría fraguarse el que sería el primer gobierno autonómico de coalición entre PP y Vox.
Mañueco: «Dialogaré con todas las fuerzas políticas»
El PP apostó fuerte por estas elecciones, que adelantó por sorpresa el pasado 20 de diciembre, elevándolas a categría de nacional y como trampolín para dar un paso más del camino que quiere emprender Pablo Casado hacia La Moncloa. Los ‘populares’ buscaban una mayoría absoluta a imagen y semejanza de las obtenidas por Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid y Alberto Núñez Feijoo en Galicia, pero finalmente no ha conseguido ese fin.
Mañueco podrá repetir como presidente de la Junta de Castilla y León- esta vez como ganador de los comicios, porque en 2019 consiguió formar gobierno con Cs a pesar del triunfo del PSOE- pero ahora el PP está en manos de Vox y este escenario es nuevo para el PP en esta región.
En su comparecencia en esta noche electoral el ‘popular’ no ha mencionado a esta formación y se ha limitado a decir que «iniciará un diálogo con todas las fuerzas políticas»
Abascal: «A García-Gallardo se le está poniendo la cara de vicepresidente»
Y si Mañueco no ha querido entrar de lleno en las negociaciones poselectorales, el presidente nacional de Vox, Santiago Abascal, ha hecho toda una declaración de intenciones en esta noche electoral reclamando el «derecho» de su partido a «formar Gobierno» en la Junta de Castilla y León.
«A García-Gallardo se le está poniendo cara de vicepresidente», ha añadido el líder de Vox, que ha salido con su candidato, Juan García-Gallardo, a celebrar una noche histórica para ellos.
Comentarios