El lunes 9 de enero un peligroso asteroide pasó cerca de la Tierra y nadie se enteró
El 9 de enero el asteroide 2017 AG13 pasó a solo la mitad de la distancia que separa la Tierra de la Luna de nuestro planeta.
Este cuerpo celeste tiene un tamaño de entre 25 y 35 metros —lo que equivale a un edificio de 10 pisos— y se mueve a una velocidad de hasta 16 kilómetros por segundo.
«Se estaba moviendo muy rápidamente, muy cerca de nosotros», declaró el científico Eric Feldman.
Y subrayó que el asteroide también cruzó la órbita de Venus. De acuerdo con los especialistas de la Universidad de Purdue, la posible colisión del asteroide con la Tierra podría haber causado una explosión mucho más potente que la de la bomba atómica de Hiroshima.
El riesgo de que un meteorito impacte en la Tierra es mayor de lo que se pensaba – Documento del metorito caido en Namibia (video)
Los expertos aseguran que el riesgo de que un meteorito impacte en la Tierra es mayor de lo que se pensaba. Por eso, en Estados Unidos un grupo de astronautas estudian medidas para prevenir esa amenaza.
Sin ánimo de ser fatalistas ni sensacionalistas, publicamos esta nota de TVE que es de interés del mundo entero hoy y la complementamos con nuestros propios archivos sobre los meteoritos con un especialista del tema.
Con España vale recuperamos un material que consideramos muy valioso para ilustrar esta noticia dado que se trata de un reportaje realizado a un uruguayo que fue director del mayor radiotelescopio del planeta, el Observatorio de Arecibo en Puerto Rico.
[youtube]http://youtu.be/Y6oM_lO7gaU[/youtube]
El Dr. Daniel Alschuler entrevistado por el Dr. Marví Teixeira nos relata y muestra como ingresó a la tierra un meteorito encontrado en Namibia Africa en 1836.
La cámara de Mario Corrales recorre el museo del observatorio mostrando como funciona el radiotelescopio y los objetos caidos del espacio que se guardan en sus vitrinas. Hemos recreado la nota con imágenes tomadas de la película Impacto Profundo.
El radiotelescopio de Arecibo cumple 54 años
Aunque proyectos más modernos como ALMA o el futuro Square Kilometer Array lo superan ampliamente en capacidades el radiotelescopio de Arecibo, probablemente uno de los más conocidos del mundo al haber aparecido en Goldeneye, una de las películas de James Bond, o en el capítulo 12 de Cosmos, sigue dando el callo 54 años después de ser inaugurado.
Está construido aprovechando un hueco en una zona de terreno kárstico en el norte de Puerto Rico, y tiene la peculiaridad de que su antena, de 305 metros de diámetro, es una sección de una esfera en lugar se ser una parábola como en muchos otros casos.
La antena, además, no es sólida, sino que está formada por 38.778 láminas perforadas de aluminio de aproximadamente 1×2 metros sujetas por un entramado de cables de acero.
Aunque la antena propiamente dicha no se puede mover el receptor, que cuelga de 18 cables sujetos por tres torres, sí es móvil, de tal forma que el radiotelescopio tiene un campo de visión de 40 grados alrededor de la vertical.
Numerosos decubrimientos
Durante estos 50 años el radiotelescopio de Arecibo ha permitido determinar, entre otras muchas cosas, que el periodo de rotación de Mercurio es de 59 días en lugar de los 88 que se pensaba antes, obtener las primeras pruebas de que existen las estrellas de neutrones, detectar el primer púlsar binario, el primer púlsar con un periodo de rotación medido en milisegundos, y los tres primeros planetas extrasolares de los que tuvimos noticia, alrededor del púlsar PSR B1257+12.
Además, dado que el radiotelescopio cuenta con tres emisores de radar, es capaz de obtener imágenes de asteroides como 4769 Castalia, el primer asteroide del que jamás obtuvimos imágenes mediante radar, o de cosas como la distribución de hielo en los polos de Mercurio.
Gracias a sus emisores es también extremadamente útil para seguir la trayectoria de asteroides próximos a la Tierra y así poder determinar el grado de peligro de que choquen con nosotros.
Mensaje a las estrellas
Arecibo es también fuente de datos para programas de búsqueda de vida extraterrestre como SETI@home y Astropulse.
También fue utilizado en 1974 para enviar un mensaje hacia el cúmulo globular M13 con información sobre la Tierra y los humanos codificada como una serie de bits, aunque dado que M13, también conocido como el Cúmulo de Hércules, está a unos 25.000 años luz de la Tierra tardaremos un poco en recibir una posible respuesta.
Durante la primera década de este siglo problemas de financiación hicieron temer que pudiera terminar siendo cerrado, aunque en la actualidad parecen superados, así que, convenientemente mantenido y actualizado, al radiotelescopio de Arecibo aún le queda cuerda para rato.