Cuando de «fe» se trata, hasta las piedras la transmiten.
«La piedra del corazón» luego de su gira por Francia y Suiza ha regresado a Uruguay y miles de personas pasaron a tocarla y fotografiarla por la sede del grupo «Rama» que la ha puesto en exibición. Mucho son los que creen que esta ágata con forma de corazón, hallada hace 41 años, transmite una energía especial, por eso quieren tocarla y algunos hasta rezar delante de ella.
Hace 41 años, Laires Luciano Lucas preparaba una exportación de piedras extraídas de su propia cantera. El operario la tiró desde el camión al piso y se partió en dos partes casi iguales. Lucas ha dicho que observó inscripciones en cristales en su interior y al unir las partes se dio cuenta que tenía la forma de un corazón. La familia Lucas la conserva poniéndola a disposición de quien quiera verla: Laires ha dicho que había encontrado algo «superior al hombre».
Hugo Lucas ha ido a París el 9 de noviembre del 2010 con el ágata de 7 kilos y durante 20 días ha recorrido varias provincias francesas y Suiza.
Opinión técnica
El geólogo uruguayo Claudio Gaucher ha estudiado esta geoda con cristales de cuarzo en 1997. Concluyó que tiene una antigüedad de 130 millones de años y en cuanto a las formas son ordenadas y regulares como si hubieran sido hechas por alguien.
En su opinión «hay dos escrituras que se parecen por su grafía y se ve; una es en hebreo y otra es la rúnica».
Se pueden observar inscripciones tales como una «J» tal vez de Jesús, o la «C» de Cristo, un pez que se puede interpretar como un signo cristiano, dijo a Hugo Lucas uno de los hijos del descubridor de la geoda. En la misma línea se observan 13 signos y la palabra «MIL» de milenio tal vez y finalmente se observa una mujer llevando a un niño en brazos, lo que puede ser interpretado como la virgen María con Jesús; otra imagen representa una paloma o un corazón dependiendo de la posición en que se la observe.
que cosa maravillosa, nuncahabía escuchado hablar de esta piedra. Voy a ver si encuentro adonde es el grupo Rama, me encantaría pasar a verla, y ……… tocarla!